Según el Índice de la Fundación Avance para la Libertad y Tax Foundation.
Por tercer año consecutivo, la Comunidad de Madrid se ha erigido de nuevo en la administración regional de España más competitiva desde el punto de vista fiscal, con respecto al resto de las comunidades autónomas y provincias vascas. Así lo establece la reciente valoración y estudio en conjunto de la Fundación Avance para la Libertad y la americana Tax Foundation, quienes analizan el funcionamiento de tributos como la Renta, Patrimonio, Sucesiones y Donaciones, Transmisiones Patrimoniales, Actos Jurídicos Documentados e Impuestos Propios.
El Índice Autonómico de Competitividad Fiscal (ICAF) tiene en cuenta el efecto de estos tributos sobre el clima de la actividad empresarial, el crecimiento económico y empleo, la complejidad y simplicidad de la aplicación de los modelos fiscales, su transparencia y, el uso y coste de estos recursos, entre otros factores.
Mayor número de impuestos, según los cánones de ambas instituciones, no alienta la competencia fiscal; más bien al contrario, y considerando que, un territorio con menores costes tributarios es más atractivo para la inversión y tenderá a experimentar crecimiento económico.
En el ranking, y tras Madrid, siguen liderando la fiscalidad Vizcaya, Álava y Guipúzcoa, seguido de Canarias. En el lado contrario, los últimos en la cola, encabezan Cataluña, Comunidad Valenciana, Aragón, Asturias y Extremadura.
En sintonía con Europa
En el caso de Madrid, su posición de relevancia se establece, no solo por su competitividad fiscal con resto al resto de comunidades autónomas -es la única que ha eliminado los impuestos propios y la única en la que el Patrimonio está bonificado al 100%-, sino respecto a los impuestos de la Unión Europea, con quien también compiten estas administraciones.
Así, la comunidad presidida por Isabel Díaz Ayuso es la única comunidad que ha mantenido un tipo impositivo máximo del 45% en sintonía con los demás países europeos como Alemania, Reino Unido, Luxemburgo, Suiza, Noruega, los países del este de Europa o los bálticos.
En el polo opuesto, la Comunidad Valenciana -una de las más gravosas en términos tributarios- aplica hasta ahora un tipo marginal máximo del 54%, el más alto de Europa, únicamente superado por Austria (55%), Francia (55,4%) y Dinamarca (55,9%), sin dejar de señalar que en Dinamarca los trabajadores solo tributan en el impuesto de la renta y no tienen que soportar la carga adicional de las cotizaciones a la Seguridad Social como en España y en los demás países europeos.
Cataluña cuenta con el triple de impuestos que el resto de CCAA, concretamente 15
En las antípodas de Madrid se encuentra Cataluña. En la última posición, cuenta con el triple de impuestos autonómicos que las demás comunidades. Concretamente 15. Y es más, en 2022 por los cambios en el impuesto de la renta ha perdido tres posiciones. Y es que Cataluña grava desde la estancia en los establecimientos comerciales, las viviendas vacías, como las emisiones de dióxido de carbono de los vehículos de tracción mecánica.
Por impuestos, Álava se mantiene la primera posición en el Índice en el impuesto de la Renta, seguida de Guipúzcoa y de Vizcaya, y tras ellas Madrid y Castilla y León.
En cuanto a Patrimonio, Madrid obtiene el primer puesto, y destaca el avance de Galicia que se sitúa en segunda posición por la bonificación que aplica sobe la cuota íntegra del impuesto, con Vizcaya y Álava en tercer y cuarto lugar, mientras Extremadura está en el último lugar. Y, a propósito de Sucesiones, las primeras posiciones las ocupan Andalucía, Cantabria y Galicia, seguidas de Castilla y León y Madrid.
El resultado de las dos décadas
Este martes, y con motivo de la entrega de distinciones del Índice Autonómico de Competitividad Fiscal, el consejero de Hacienda, Javier Fernández-Lasquetty, en representación del Gobierno de la Comunidad de Madrid, destacó las casi dos décadas en las que en Madrid no se suben impuestos y se han bajado todos, devolviendo los contribuyentes una proporción mayor de sus recursos". Gracias a ello, "somos la primera economía de España desde 2018, aportando el 19,3% del PIB nacional", dijo el consejero, lo que ha permitido un ahorro por contribuyente de 17.620 euros y, al mismo tiempo, contar con unos servicios públicos de la mayor calidad".
Fernández-Lasquetty también destacó que las sucesivas bajadas de tributos han beneficiado, sobre todo, a las rentas bajas, han dinamizado la economía, generado más riqueza y empleo y, por ello, ha aumentado la recaudación, lo que ha permitido a la Comunidad de Madrid incluso ser la región que más contribuye a la solidaridad con el resto en la contribución a la financiación de sus servicios públicos fundamentales.
Además, y como efecto positivo, reflejó el efecto "contagio en otras comunidades autónomas, que se han sumado a las bajadas de impuestos en Madrid independientemente del partido político que las gobierne".
Así, ha destacado la "eliminación del Impuesto de Patrimonio en Andalucía, la bonificación en Galicia y el anuncio de Murcia, Castilla y León, Comunidad Valenciana y País Vasco de reducir también el IRPF".
FUENTE: EL ECONOMISTA