La auditoría tiene como
objetivo evitar conflictos en la compraventa de empresas.
La due diligence o diligencia debida es un estudio previo
que realiza una empresa sobre otra cuando quiere comprarla o invertir en ella.
El análisis abarca distintas áreas para determinar si cumple con sus
obligaciones legales y no existen riesgos de este tipo que pongan en jaque su
actividad. El fin último de este procedimiento es evitar que, como se dice
coloquialmente, se dé “gato por liebre”.
En esta ocasión nos
centraremos en la due diligence laboral,
pero cabe realizarla también en el área mercantil, financiero, compliance penal, etc. Se
lleva a cabo a modo de auditoría, esto es, recabando la mayor cantidad de
documentación e información de la empresa en estudio. Y todo ello se realiza,
claro está, con el compromiso por parte de la entidad, que deberá entregar de
forma puntual y completa todos los antecedentes que le sean requeridos por los
profesionales a cargo de la diligencia debida.
En numerosos casos, la
información a la que accederá la entidad externa que realice la due dilligence será de
carácter confidencial y el acceso a la misma podría estar supeditado, por
ejemplo, a lo que indique la normativa de protección de datos, etc. Para que la
empresa analizada cuente con todas las garantías pertinentes, será necesario
contar con un anexo al contrato del encargo profesional que incluya un
clausulado que proteja la confidencialidad de la información y que cumpla con
los preceptos en materia de protección de datos.
Para hacer una due dilligence laboral
exhaustiva, el equipo de abogados que la lleve a cabo deberá recabar
antecedentes de la empresa, cuyo volumen variará dependiendo del tamaño de
esta: no es lo mismo realizar este tipo de procedimientos en una multinacional
o empresa de gran tamaño que en una pyme. En determinados casos, será necesario
acceder a la información corporativa a modo de “cata”, que significa que se
revisará una muestra representativa de la documentación, mientras que en una
empresa de tamaño mediano o pequeño se recabará la totalidad de la misma.
Para empezar, se habrá de
contar con un organigrama de la empresa para que los responsables de la
due dilligence laboral puedan familiarizarse con
la organización interna de la compañía. Así, se accederá a una muestra de la
documentación más precisa y representativa, que refleje fielmente la situación
de la compañía.
En el caso concreto de
la due dilligence laboral,
entre la documentación que requerirá el bufete que realice este procedimiento
estará el convenio de la empresa (si lo tiene), así como los distintos
contratos laborales, separados por departamentos, áreas de negocio, equipos de
trabajo, etc.
También se estudiarán la
política retributiva y las condiciones salariales de los trabajadores,
accediendo también a los recibos de las nóminas. Dependiendo de la fecha en la
que se realice el informe, se pedirán las nóminas del último año natural o bien
de un periodo distinto, pero siempre debe ser un periodo suficientemente amplio
para que refleje fielmente la situación de la empresa. Adicionalmente, se
recopilará información sobre la política de pagos, devengo de los bonus, pagas
extra, retribución variable, etc.
De existir una plataforma
laboral del departamento de recursos humanos de la empresa, también se accederá
a la misma para verificar su funcionamiento interno. Asimismo, se analizarán
los órganos de representación legal de los trabajadores, la manera como está
organizada (comité de empresa o delegado de personal) y cómo desarrollan sus
funciones. Y se estudiará cómo trabaja e interviene en el día a día de la
empresa el organismo sindical más representativo.
En cuanto a la jornada
laboral, se estudiará cómo se distribuye, el horario de trabajo, las
vacaciones, la organización interna, así como aspectos clave en el cómputo del
horario de trabajo: el control horario de la jornada laboral y el responsable
de esta tarea. Otro paso fundamental es el análisis del cumplimiento en materia
de prevención de riesgos laborales, las medidas del plan de prevención de la
empresa y el encargado de seguirlo.
Se accederá también al plan
de igualdad, el plan de blanqueo de capitales y compliance profesional
de la empresa y quién ejerce como Compliance
Officer. Y se analizarán de forma pormenorizada los procedimientos
judiciales del ámbito laboral en curso, así como los despidos del último
ejercicio, el resultado de las conciliaciones administrativas previas a la
jurisdicción social y el resultado judicial.
Posteriormente, se elaborará el informe que detallará, por orden establecido en un índice, todos los puntos de afectación laboral en la empresa, de la documentación estudiada, y las conclusiones, que deben ser claras, concretas y concisas, para ayudar a la empresa interesada a tomar una decisión en base a información fidedigna y que refleja la situación real de la compañía en la que se ha realizado la due dilligence laboral.