Se ha establecido una normativa que otorga un permiso especial a empleados que necesiten atender a emergencias familiares de forma inmediata.
Este
permiso, amparado bajo la categoría de causa de fuerza mayor, permite a
los empleados ausentarse del trabajo para atender a familiares, ya sea por enfermedad
o accidente, independientemente de si residen con ellos.
Aunque
no hay decisiones judiciales específicas al respecto, se entiende que:
a.
Alcance
del permiso
No hay
restricciones en cuanto al grado de parentesco. Esto implica que cualquier
familiar del empleado que necesite asistencia urgente califica para este
permiso. Además, se extiende a cualquier persona que viva con el empleado, sin
necesidad de lazos familiares o afectivos.
b.
Requisitos
de conveniencia
La
norma contempla como conveniente a cualquiera que comparta el hogar con el
trabajador. Está pendiente de ver si los tribunales requerirán pruebas de una
relación afectiva o familiar, o si cualquier forma de convivencia es válida.
c.
Exclusividad
del cuidado
El
permiso aplica cuando el empleado es la única persona disponible para cuidar
del familiar.
d.
Duración
y remuneración del permiso
Se
otorgan hasta cuatro días al año, con remuneración completa, incluyendo
salarios y complementos, a excepción de aquellos vinculados a la presencia
física en el trabajo. Este límite puede incrementarse mediante convenios
colectivos o acuerdos empresariales.
e.
Obligaciones
del empleado
Es
necesario que el empleado justifique la ausencia y la urgencia del
acompañamiento. De lo contrario, puede afrentar sanciones disciplinarias por
inasistencias.
Este permiso representa un avance significativo en la conciliación de la vida laboral y familiar, proporcionando un marco para atender emergencias sin comprometer la estabilidad laboral.